Ya en tiempos de la antigua Grecia, Platón etiquetaba al arte como una copia de la copia que intentaba reflejar la realidad. Esa copia hacía que el artista fuera considerado com un imitador carente de respeto. En pleno siglo XXI el debate sigue abierto. Las (dichosas) etiquetas, las influencias, y la necesidad de juzgar la evolución (o no) de una banda, divide tanto a crítica como a público de una manera considerable.
Turnstile, (queramos o no) una de las bandas del momento, han vuelto tras ese golpe de efecto que supuso Glow On (2021). Y lo han hecho teniendo más que claro lo que quieren. Todo en el grupo está claramente medido. Sus apariciones en directo. Sus outfits. Incluso todo el elemento visual que acompaña a su música. No hace falta más que echar un vistazo al videoclip de «Birds», donde el giño a Jimmy Hendrix y su directo en Maui en 1970 es más que evidente. ¿Imitación?
Never Enough es un disco que contiene catorce cortes y un hilo conductor que a los más veteranos les trasladará al programa de los ochenta llamado Planeta Imaginario. Mucha transición larga, mucho sintetizador, mucho efecto… pero también muchas guitarras, mucha variedad y, porqué no decirlo; mucha diversión.
Nuestro amigo Ipanema Leaks comentaba que el momento actual de Turnstile le recuerda al de unos Red Hot Chili Peppers de la época del Blood Sugar Sex Magik (1991). Nosotros estamos en parte de acuerdo, pero los vemos más en el momento del Californication. También encontramos un sabor (salvando las distancias enormes) al concepto que Daft Punk utilizó en su Random Access Memories (2013). Y si todo esto es así, el resultado tan solo puede ser el que es; variedad.
En Never Enough lo mismo te encuentras las trompetas de «Dreaming», los riffs de «Dull», la explosión de la mencionada «Birds», o la calma y melodía de «Time Is Happening». ¿División de estilos o unificación? La respuesta ya depende de cada uno. Nosotros lo tenemos claro. Cómo también tenemos claro que este disco gana con cada escucha y que eso es señal de que, además de planeadas, las cosas están bien hechas.
Conclusión: Kant se fundamenta en la idea de que para comprender un nuevo concepto, este debe ser relacionado con conocimientos y experiencias preexistentes. Turnstile siguen en su proceso de abrir su música (ya no podemos mencionar el término «hardcore») a cuanta más gente mejor, y para ello, además de seguir la estela del Glow On, nos ofrecen muchos sonidos que somos capaces de relacionar, y que hacen de Never Enough lo que es; un señor disco con el que además de abrir los oídos, debemos abrir la mente. El futuro ya está aquí.