Linoleum
Quizás descubrí a Vision como muchas y muchos de los que estáis leyendo estas líneas, a través de un Punk-o-Rama, el número seis, concretamente. Publicado en junio de 2000, contenía el tema «Close Minded» con el cual, aún sin haber cumplido la veintena, me sentía fielmente identificado; ¿por qué voy a tener que escuchar otros tipos de música si este es el que me llena?.
Esa canción me presento a Vision, pero el disco al que pertenecía, Watching the World Burn (2000), fue solo la punta del iceberg. Me interesé, me informé, y llegue hasta este The Kids Still Have a lot to Say (1998), una de las joyas del NJ Hardcore.
¿A caso hay un disco que empiece de manera tan directa y tan perfecta como lo hace este con «Two Wishes»?. Llevo escuchándola veinte años y esas guitarras y esos coros aún me ponen la piel de gallina. Mi canción favorita de ellos de siempre. Lo realmente grande de este álbum es que la siguiente canción, «Live Today», un puño en toda la cara, mantiene el nivel de su predecesora, y así sucede corte tras corte. El grupo no baja la guardia y presenta una colección de temas hardcore cual enciclopedia de estudio.
«Pick of the Litter» también desprende esa esencia a los 90s tan valiosa hoy en día. Increíble su intro y las ganas de montar un pit allá donde te pille cuando la escuches. Ese solo de bajo hace que se pare el mundo. El nivel sigue en lo más alto con temas como «Looking Back» un tema más melódico en el que según en que partes me recuerda a unos jóvenes Undeclinable Ambuscade, o en «Dissafected» con esa preciosa intro con un saxo que frena en seco para dar pasa al hardcore más puro.
Llevo más de media reseña y aún estoy por el quinto corte de los catorce que forman este discazo, sirva esto como referencia de la grandeza de este álbum. El hardcore más acelerado en «What You May Find» y sus lineas de bajo, el medio tempo divertido en «Disguise», o el himno generacional en «The Kids Still Have a lot to Say», siguen manteniendo el nivel tan algo como la energía de Vision.
Antes de cerrar, aún hay tiempo para el bajo que da pie a las guitarra, que dan pie a una batería acelerada, que a su vez da pie a la voz del gran Dave Franklin en «What’s Understood». Y también para «Something Left of Me» donde el grupo adopta el sonido que estaba por venir en su próximo disco mencionado al principio de este tributo.
Hablando de tributos, no podría acabar estas líneas sin recordar a Dave Franklin, voz y alma de Vision, quien nos dejó hace ya tres años a la pronta edad de 47. Va por ti Dave, D.E.P.
