Linoleum
En plena rutina de cuarentena, llegué a una sorprendente publicación donde aparecía el nombre de un grupo que me llamó la atención: Chabad Religion. La tipografía (igual que la de Bad Religion), y que el grupo perteneciera a la discográficamente Fat Wreckchords me hizo investigar un poco más.
Lo primero que aprendí es que Chabad, Jabad en castellano, es una especie de movimiento, una ideología o una corriente mediante la que se hace jadisut. Es una manera de practicar el DIY (hágalo usted mismo) con el Jasidut, es decir, revitalizar la vivencia espiritual del judaísmo. Nosotros, y por afinidad nos vamos a quedar con el término DIY que bien empasta en toda esta mezcla. Después también averigüé que los componentes de este grupos son, Yotam Ben Horin (Useless Id), Fat Mike (NoFX), Johnny de Old Man Markley, y Baz de The Decline’s Simphony. Los tres últimos intengrates también de los D-Composers.
Una vez descubierto los pilares y el porqué de este disco (y su nombre), me dispuse a escucharlo. Doble sorpresa y conclusión a la que llego en cuanto a esta práctica: primero, todo el disco está cantado en Hebreo, segundo, el resultado es sorprendente. Este disco demuestra ser otra de las ideas locas de un Fat Mike que se va a quedar sin cosas que inventar en breve, pero a la vez demuestra que los borrachos nunca mienten. Estamos ante diez cortes de punk rock made in Fat, los cuales a veces recuerdan a Useless ID (la voz tiene esas cosas) y otras a los Me First and the Gimme Gimmes.
Por si fuera poco, los temas están plagados de guiños musicales a otros temazos míticos del sello; «Shabbat Shalom» comienza con el silbido más famoso de los Vandals y acaba con los coros de otra popular canción de NoFX. Mi favorita, «Shalom Alechem» comienza con la intro de «Island of Shame» de Lagwagon y tienes toques internos de Bad Religion, mientras que la encargada de cerrar el disco, «Oshem Salom» acaba con unos coros míticos de No Use For a Name. Precioso.
Conclusión: Pasar la cuarentena con Fat Mike debe ser deporte de riesgo. Entre idas y venidas este se inventará un grupo jugando a intentar rizar el rizo de la extravagancia, y le saldrá bien. Chabad Religion es el enésimo proyecto de riesgo que triunfa dentro de la discográfica de los huevos de oro. Diferente, pegadizo y con buen sonido. Ahora bien …¿alguien nos traduce las letras?.
